Cuando enseñar se convierte en precariedad: la situación del profesorado catalán

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Aurora Trigo Catalina

En silencio, sin que apenas la sociedad lo advirtiera, el profesorado de Cataluña ha ido perdiendo poder adquisitivo y dignidad profesional durante los últimos quince años. Lo que podía parecer una simple congelación salarial se ha convertido en una erosión profunda y sostenida que afecta por igual a la calidad de vida de los docentes que al futuro de la educación pública.

Un reciente estudio alerta de que esta degradación no es fruto de decisiones aisladas, sino de un conjunto de recortes encadenados que han convertido el sistema retributivo docente en un espejo roto (Trigo y Gascó, 2025). Esta situación no sólo tiene consecuencias económicas individuales, sino que, colectivamente, debilita la dignidad de la profesión docente y pone en peligro la calidad educativa. Como decía Aristóteles, «lo que hacemos día tras día es lo que nos acaba definiendo»; y cuando la tarea docente se desarrolla bajo presión y precariedad, lo acaba pagando la sociedad entera.

En este artículo hago una síntesis de los datos clave del reciente estudio con especial atención en los recortes – sueldos, sexenios, pagas extraordinarias, falta de convocatoria de cátedras – y explico por qué Cataluña es, según el análisis, la segunda comunidad autónoma donde los profesores de secundaria están peor retribuidos si se considera la Paridad de Poder Adquisitivo (PPA).

La pérdida de poder adquisitivo: un déficit estructural

En los últimos años, la situación económica en Cataluña y España se ha caracterizado por una elevada inflación, que ha erosionado el poder adquisitivo de todos los trabajadores, incluidos los profesores de secundaria. La evidencia es contundente: entre 2010 y 2024, la pérdida acumulada de poder adquisitivo de los profesores ha sido alarmante: un -21,64%.

Tal y como se aprecia en la Tabla 1, la causa principal es sencilla: los precios suben más rápido que los salarios. En este periodo, la inflación acumulada en Catalunya fue del 35,69%, mientras que la revalorización salarial del profesorado sólo alcanzó el 14,05%. Esto significa que un docente principiante deja de percibir, en términos reales, unos 7.757 € brutos al año, el equivalente a trabajar más de dos meses al año sin cobrar.

Tabla 1. Inflación, subida salarial y pérdida de poder adquisitivo de los profesores de Cataluña

 FUENTES: INE (2025) Índices por comunidades autónomas: general y de grupos ECOICOP. http://www.ine.es. Ministerio de Política Territorial i Función Pública (2025), Retribuciones del personal funcionario. https://www.sepg.pap.hacienda.gob.es

Recortes que van más allá del sueldo: una plétora de pérdidas acumuladas

Además de la pérdida de poder adquisitivo, los profesores de secundaria catalanes han sufrido otros recortes y modificaciones estructurales que han degradado su nivel de vida y sus condiciones laborales. Entre las más significativas:

• Reducción de las pagas extraordinarias: antes de 2010 constituían una parte esencial del sueldo. Con los recortes, las pagas de junio y diciembre quedaron limitadas al 80% del salario mensual.
• Recorte del complemento por sexenios: el primer estadio se alarga de 6 a 9 años a partir de 2012, lo que retrasa y reduce la retribución asociada. Aunque en 2024 se recupera parcialmente, el Gobierno todavía no ha asumido el retorno de la deuda acumulada, estimada en unos 1.100 € anuales por docente.
• No convocatoria de cátedras: desde 2011 no se convocan plazas de catedrático, bloqueando la progresión profesional y privando al profesorado veterano de un reconocimiento salarial de unos 2.796 € anuales.
• Extinción del régimen de clases pasivas: los nuevos funcionarios pasan a la Seguridad Social, lo que implica pensiones más bajas y una jubilación más tardía.
• Recortes indirectos: supresión de licencias retribuidas, aumento del horario lectivo hasta 20 horas, eliminación de la reducción de 2 horas para los mayores de 55 años, desaparición de la ayuda bufanda para la jubilación anticipada, suspensión del Fondo de Acción Social, etc.

Cataluña, a la cola en la comparación territorial

Además, según el análisis comparativo con otras comunidades autónomas, el profesorado de Cataluña se encuentra entre los tres peor retribuidos del Estado. El estudio alerta de que esta situación es aún más grave cuando se aplica el criterio de Paridad de Poder Adquisitivo (PPA), es decir, cuando se tiene en cuenta el coste de la vida (vivienda, servicios, consumo). El estudio denuncia que, en relación al coste de vida, las retribuciones del profesorado catalán quedan hasta un 13,5% por debajo de la media estatal y un 24% por debajo de comunidades como la de Castilla-La Mancha.

Efectos globales: del desánimo individual al riesgo colectivo

Este desajuste —salario bajo y alto coste de vida— pone de manifiesto que la retribución no es sólo una cuestión nominal, sino una cuestión de dignidad y sostenibilidad de la profesión docente. La combinación de bajos salarios, pérdida de poder adquisitivo y falta de reconocimiento tiene efectos más amplios:

• Fuga de talento y desincentivo a dedicarse a la educación pública: muchos docentes acaban descartando una carrera en la enseñanza por la inestabilidad o porque las condiciones no garantizan una vida digna, especialmente en zonas donde el coste de la vida es elevado. Esta tendencia empeora la precariedad de personal, sobre todo en especialidades saturadas. El estudio menciona que numerosas sustituciones quedan sin cubrir.
• Deterioro de la calidad educativa: ratios elevados, carencia de recursos para la educación inclusiva, sobrecarga administrativa y docente, y una percepción de desvalorización profesional dificultan la excelencia y la motivación.
• Desigualdades territoriales e injusticia estructural: que un docente perciba menos según la comunidad en la que trabaja, cuando las funciones y responsabilidades son las mismas, supone una discriminación injustificable, que penaliza especialmente a Cataluña, una comunidad con costes vivos relativamente altos.

Conclusiones: dignificar la docencia es invertir en futuro

El profesorado de secundaria en Catalunya no sólo está peor pagado: vive una situación de injusticia estructural que pone en peligro la dignidad y sostenibilidad de la profesión. La combinación de salarios rebajados, pérdida de poder adquisitivo, recortes acumulativos y falta de reconocimiento profesional configura un modelo de precarización sistemática que amenaza a todo el sistema educativo.

Invertir en educación no sólo es un acto de gestión: es un compromiso con el futuro de la sociedad. Recuperar el poder adquisitivo de los docentes, garantizar una carrera profesional justa y dignificar la docencia no son opciones: son necesidades urgentes si queremos evitar la fuga de talento y la degradación de la calidad educativa.

Como decía Hannah Arendt, “la educación es el punto en el que decidimos si amamos al mundo lo suficiente como para asumir la responsabilidad que comporta”. Sin docentes bien retribuidos y respetados, esa responsabilidad queda incompleta. La sociedad no puede permitirse que aquellos que forman las generaciones futuras trabajen en condiciones que rompen su dignidad y compromiso.

Es hora de pasar de la denuncia a la acción: restaurar salarios, reconocer la trayectoria docente e invertir con valentía en educación. Sólo así podemos garantizar que los docentes, y con ellos los estudiantes, tengan un futuro digno y sostenible.

Fuente: educational EVIDENCE

Derechos: Creative Commons